El sector de pagos en España se encuentra en una fase de profunda transformación tecnológica, impulsada principalmente por la rapidez del proceso de innovación, el desarrollo de nuevas infraestructuras digitales, el auge de soluciones PayTech y la consolidación de los pagos instantáneos. Este entorno se enmarca en un contexto regulatorio complejo y en constante cambio, liderado por iniciativas europeas como la PSD3, que regula los servicios de pago y transacciones relacionadas, y que verá la luz en los próximos meses.

La Asociación Española de FinTech e InsurTech (AEFI), a través del Libro Blanco de FinTech 2.0, ha identificado cinco tendencias clave que tendrán un impacto trascendental en el futuro de los pagos en España. vinculadas estrechamente con la adopción de nuevas tecnologías emergentes, la optimización de la eficiencia en las transacciones financieras y la actualización del marco regulatorio para alinearse con las transformaciones del mercado.

1. Pagos instantáneos para fomentar la competitividad

La implementación del Reglamento de Pagos Inmediatos en la Unión Europea está impulsando el acceso universal a transferencias instantáneas en euros, una tendencia que permitirá a los usuarios realizar pagos en menos de 10 segundos, tanto a nivel nacional como transfronterizo, dinamizando el mercado y fomentando la competitividad de las empresas españolas en el ámbito europeo.

Sin embargo, resulta fundamental que este proceso se articule desde el inicio sin generar situaciones de discriminación entre los distintos actores del ecosistema financiero, garantizando condiciones de acceso equitativas para todos los proveedores de servicios de pago. Además, esta inmediatez reduce la fricción en las transacciones comerciales, promoviendo la adopción de soluciones digitales por parte de empresas de todos los tamaños. En este sentido, la interoperabilidad entre sistemas de pago nacionales e internacionales será clave para garantizar el éxito de esta tendencia.

2. Del Open Banking al Open Finance

La evolución desde el Open Banking hacia el Open Finance, impulsada por regulaciones como la PSD3 y el Reglamento FiDa, relativo al marco de acceso a los datos financieros, está facilitando la interoperabilidad entre distintos actores del sector financiero. Esta tendencia promoverá la creación de nuevos servicios personalizados, fomentando la colaboración entre bancos tradicionales, FinTechs y otros proveedores de servicios financieros. La integración de APIs abiertas permite que los usuarios gestionen múltiples servicios financieros desde una única plataforma, potenciando la competencia y mejorando la experiencia del consumidor. Además, el acceso a datos financieros en tiempo real facilita el desarrollo de productos innovadores y ajustados a las necesidades del mercado.

3. Ciberseguridad y reglamentos estrictos contra los ciberataques

A medida que los sistemas de pago se digitalizan, también aumentan los riesgos de ciberataques y fraudes financieros. La implementación de normativas como el Reglamento DORA está estableciendo requisitos estrictos en materia de resiliencia operativa digital, garantizando la protección del usuario frente a riesgos tecnológicos. La adopción de medidas como la autenticación multifactor y la monitorización continua de transacciones son fundamentales para preservar la integridad de los sistemas de pago. Asimismo, el fortalecimiento de la cooperación entre entidades financieras y proveedores tecnológicos será esencial para mitigar los riesgos cibernéticos emergentes.

4. IA para automatizar procesos y detectar patrones anómalos

La IA está siendo incorporada para optimizar procesos transaccionales, desde la autenticación segura hasta el análisis predictivo de riesgos financieros. Esta tecnología no solo mejorará la eficiencia operativa de las entidades financieras, sino que también personalizará la experiencia del usuario al ofrecer servicios adaptados a sus necesidades. Los algoritmos de Machine Learning permiten detectar patrones anómalos en tiempo real, reduciendo el riesgo de fraude. Además, la automatización de procesos rutinarios agiliza la gestión financiera, permitiendo a las empresas enfocarse en la toma de decisiones estratégicas.

5. Pagos digitales y euro digital: un reto para la innovación y la competencia

El avance hacia la digitalización de los pagos está acompañado por el desarrollo del euro digital, una iniciativa impulsada por el Banco Central Europeo (BCE) que pretende crear una versión digital del efectivo accesible a ciudadanos y empresas. No obstante, tal y como está concebido actualmente, el euro digital plantea numerosas incertidumbres y genera un amplio consenso crítico dentro del ecosistema FinTech.

Desde la perspectiva del sector, este proyecto no aporta valor añadido respecto a las soluciones de pago digitales ya existentes y podría incluso desplazar la innovación privada, al introducir un instrumento gestionado directamente por los bancos centrales. Además, la posible desintermediación de entidades financieras y la falta de claridad sobre el modelo operativo, la privacidad y los límites de uso refuerzan la preocupación por su impacto en la competencia y la autonomía del ciudadano.

Desde AEFI, consideramos necesario abrir un debate amplio y transparente con todos los actores implicados, para garantizar que la eventual implantación de esta herramienta no suponga un retroceso en el desarrollo de un ecosistema de pagos plural, competitivo y centrado en la innovación tecnológica.